Estilo de vidaTexto: Nora Vega
La felicidad es infinita cuando ya tenemos comprados los tickets de avión; la ilusión de conocer un nuevo destino es indescriptible, pero armar los equipajes para algunas personas puede ser un verdadero dolor de cabeza. Aquí, algunos trucos que no fallan durante la difícil tarea de hacer las valijas.
El mayor reto de cualquier viajero, y más aún del viajero frecuente, es recorrer ligero. El número de días que vas a pasar fuera de la ciudad, cuál o cuáles son los destinos que vas a visitar, el tiempo y el tipo de actividades que vas a realizar, son algunos factores claves a la hora de decidir qué tipo de maleta llevar y cuáles son los elementos indispensables.
Viaje corto o de negocios
Con una maleta chica o una mochila uno se debería manejar de sobra. Averiguá sobre el clima para evitar llevar 10 kilos innecesarios de ropa. Ideal es llevar contigo solo una maleta de mano en la cabina del avión para evitar documentarla y así no perder tanto tiempo en el aeropuerto.
Ropas versátiles que se puedan ir combinando de diferente forma son perfectas para este tipo de viaje. Si sos mujer no deben faltar los accesorios; todo cambia con unos aros diferentes. A la hora de reuniones de trabajo, un blazer en un tono básico y versátil —como el negro, el azul marino o el blanco— nunca fallan. Infaltable es un vestido negro, te servirá para cualquier ocasión.
Si sos hombre y viajás por trabajo necesitás llevar camisas en la maleta, así que ya sabrás lo complicado que resulta que estas prendas no se arruguen y lleguen en buenas condiciones a tu destino. Un porta trajes es la solución. A la hora de guardar las corbatas lo mejor es enrollarlas, no doblarlas.
Y ¡atención!, que una pasta dental suelta dentro de la valija puede hacer verdadero un desastre. Comprá un neceser para todos aquellos artículos personales y de aseo. Los organizadores son muy útiles a la hora de guardar de forma compacta, además logran mantener el orden dentro del equipaje. También son un plus a la hora de encontrar lo que se necesita dentro de la valija ya que los artículos como ropas y zapatos van a estar separados.
Viajes largos
Cuando no viajamos a menudo, tenemos la sensación de que vamos a necesitar un montón de cosas. Pero en realidad, cuanto menos llevás es mejor siempre, sobre todo para facilitar los traslados. Viajar liviano tiene muchas ventajas, pero a veces, resulta complicado reducir todo lo que se necesita y más aún teniendo en cuenta las ajustadas medidas que permiten las aerolíneas.
En realidad no necesitás mucho. Es tentador llevar diferentes atuendos para cada posible ocasión, pero puede hacerte perder dinero en el caso de que te excedas con el límite de peso. Acordate que existe la posibilidad de ¡lavar la ropa!
Otro detalle no menor es que uno va adquiriendo recuerdos o regalos, así que se debe prever un lugar para estos nuevos artículos. El ítem imprescindible es un calzado cómodo, si son dos mucho mejor. Otro de los indispensables al preparar un equipaje es un pequeño botiquín donde guardar los medicamentos básicos.
¿Qué prendas llevar?
A la hora de armar el equipaje es necesario que veas cómo se comportará el clima durante tu estadía, esto será de gran ayuda al momento de elegir qué ropas vas a llevar. También es bueno chequear con la aerolínea el peso permitido para no pasar un mal rato.
Qué nunca te falte un abrigo liviano por si cambie la temperatura, lentes de sol y bloqueador. Recomendación: procurá poner los productos del baño en una bolsa sellada o en alguna parte de la maleta en donde el resto de tus cosas no corran peligro.
No te olvides de empacar todos los cargadores que necesites (del celular, cámara, tablets, etc.). Un cargador portátil es lo primero que tenés que tener previsto. Tener con batería en todo momento tu teléfono móvil, tu cámara de fotos o tu reproductor de música es vital para disfrutar de tu viaje.
Si te encanta la tecnología y no podés viajar sin todos tus dispositivos electrónicos, una forma muy útil de ordenar todos tus cables en la valija, y que estos no se enreden entre ellos o se deterioren por el camino, es un organizador de cables.
Tip extra: a veces los equipajes no llegan o se pierden, por eso es bueno llevar una muda de ropa en tu bolso de mano siempre.
¿Mochila o valija?
Ambos tienen sus ventajas y desventajas. Elegir cuál es la mejor opción depende del destino al que vayas y es una cuestión muy personal. Con las valijas uno tiene fácil acceso a todas las cosas que se lleva y tiene mayor capacidad (aunque no deben ser tan grandes ya que el peso máximo de las aerolíneas es de 23 kilos, generalmente). Como tienen rueditas, las maletas son un gran alivio para la espalda y la cintura. En contrapartida, es difícil llevarlas en terrenos en mal estado o acarrearlas por las escaleras. Por ejemplo, se hace complicada la tarea de empujarlas en Venecia.
La mochila tiene un espíritu más aventurero. Generalmente, se viaja con dos mochilas, una para las cosas de mano y otra para la ropa. Es la opción recomendada para los amantes del trekking, porque es fácil de transportarla. Eso sí, no hay que abusar con el peso. Acordate: una mochila de viaje no debería pesar más del 25% de tu peso corporal. Lo ideal es utilizarla para los viajes en los que uno va a estar pocos días en cada lugar y en donde se camina mucho viajando de un lugar para el otro, por ejemplo, Europa, Perú, entre otros.
La valija de mano también tienen un máximo de peso permitido que oscila entre 7 y 10 kilos dependiendo de la compañía aérea. Las medidas máximas permitidas por las aerolíneas son de 55 cm x 40 cm x 20 cm para Ryanair y Vueling, 56 cm x 45 cm x 25 cm para Easyjet e Iberia; 55 cm x 35 cm x 25 cm para Air Europa y Latam Airlines, y 56 cm x 36 cm x 26 cm para Copa Airlines.
